Las pantallas verdes tienen una reputación mixta en el mundo de la fotografía. Por un lado, si se usa incorrectamente, la imagen final parece falsa. Por otro lado, las pantallas verdes permiten a los fotógrafos de estudio crear imágenes surrealistas o colocar sus modelos en escenarios exóticos. Una pantalla verde es una herramienta fantástica y hay muchas razones por las que debería usarla en su propia fotografía de estudio.
Las pantallas verdes te dan el mundo
Si tienes un estudio dedicado, ya has invertido bastante en tu fotografía, incluso si el estudio está en tu casa, reservar un espacio completo y traer todo el equipo que necesitas es caro. ¿Sabes cuánto más cuesta? Encontrar y fotografiar en el lugar.
Una pantalla verde brinda a los fotógrafos la oportunidad de colocar a sus sujetos donde quieran. En la era del arte digital, tener una colección de retratos en pantalla verde es una herramienta vital para muchos artistas. ¿Alguna vez ha notado que la fotografía de archivo casi siempre utiliza un sujeto claramente definido con un fondo blanco, borroso o simplemente distante? La mayoría de estas imágenes muestran sujetos que fueron tomados frente a una pantalla verde.
Con una pantalla verde, sus sujetos pueden volar, agregar viejas fotos familiares o simplemente recibir un fondo hermoso pero poco realista. También puede utilizar imágenes de ubicación recopiladas previamente y agregar estos fondos a los retratos de posproducción. Se necesita práctica para editar bien estas imágenes, pero si usa el mismo fondo varias veces para la graduación, el compromiso o las fotos glamorosas, puede dominar el arte de ajustar la iluminación de su estudio para reflejar las condiciones artificiales del fondo.
Esto se ve mucho mejor que simplemente derribar diferentes fondos, que en realidad nunca se ven tridimensionales. Sin embargo, es el mismo principio. Simplemente aproveche las técnicas y el hardware más nuevos. Por supuesto, este enfoque también le ahorra dinero al fotógrafo. Una sola pantalla verde es mucho más barata que un conjunto de fondos diferentes.
Editar es muy sencillo
Si odias editar retratos básicos, la pantalla verde podría ser tu nueva mejor amiga. Mientras que los fondos blancos tradicionales son propensos a tener imperfecciones, arrugas y otros ojos, las pantallas verdes literalmente desaparecen durante la edición. Puede agregar un fondo blanco limpio con muy poco trabajo. Es un atajo a la perfección.
Por el contrario, si la edición es una de sus partes favoritas de la foto o si usa sus fotos como parte de manipulaciones elaboradas, una pantalla verde puede ayudar a mejorar sus imágenes finales. Después de todo, cortar el cabello de una persona en Photoshop nunca será más que una tarea. También rara vez parece exactamente correcto. La pantalla verde guarda todo sobre el tema, pero no muestra nada, ni siquiera un fondo blanco, que deba editar. Esto le da más tiempo para concentrarse en el arte de su proyecto.
El engranaje es simple
Lo más probable es que ya esté trabajando con una cámara digital. El único equipo costoso que realmente necesita para trabajar con la pantalla verde es su cámara digital y la computadora que usa para editar. Si ya tiene ambos, sus principales inversiones ya se han realizado.
Las pantallas verdes suelen ser muy baratas. Dependiendo del material, puede obtener un fondo de tela por menos de $ 20. Hay opciones más caras disponibles, por supuesto, y probablemente ofrezcan mejores resultados. Los materiales de mayor calidad, como la muselina, cuestan más. Los fondos de pantalla emergentes rígidos, como FancierStudio Foldable Wallpaper, cuestan casi el doble que las opciones más baratas y son bastante pequeños. Sin embargo, están libres de cortinas y arrugas que puedan proyectar sombras que dificultarán la edición.
Si opta por un fondo de tela tradicional, puede montarlo en la pared o comprar un soporte. Cuestan entre $ 30 y $ 100 según el tamaño, los materiales y las características adicionales. Un soporte básico, como el sistema de fondo ajustable de 10 pies de LimoStudio, debería cubrir casi todas las necesidades de fotografía de estudio.
Finalmente, necesitará fondos digitales. Es posible que no necesite comprarlos. Hay muchas cosas disponibles de forma gratuita a través de colaboraciones creativas en línea y siempre debes trabajar en el desarrollo de algunos de ustedes. Después de todo, ningún otro fotógrafo tiene su ojo o estilo, por lo que es bueno tener fondos digitales que complementen el estilo de fotografía en el que lo usa. tu estudio.
¡Finalmente, ES DIVERTIDO!
Además de todos los aspectos técnicos, trabajar con una pantalla verde es simplemente divertido. Es un excelente atajo para retratos simples y permite a los fotógrafos con casi cualquier presupuesto expandir su rango. Lleve la naturaleza al estudio a través de fondos digitales prefilmados y abra la puerta a proyectos verdaderamente creativos. Las herramientas son sencillas y probablemente ya tenga a mano el equipo más caro. Ya sea que desee reducir su trabajo, encontrar el fondo perfecto o darles superpoderes, una pantalla verde y algunas ediciones pueden darle sueños.
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